Quiero empezar recordando que Cataluña nunca tuvo tantas competencias, ni tanta soberanía política como en la actualidad. No se trata sólo de un problema de democracia, ya que la democracia no se entiende sin el respeto a las leyes con que la propia democracia nos dota.
En democracia y con democracia las leyes se cambian. Ni se desobedecen, ni se ignoran.
El derecho a la autodeterminación en el derecho internacional, es un derecho de los territorios colonizados, y Cataluña ni es, ni ha sido nunca una colonia, si no que ha sido, y somos parte integrante de España.
La independencia de Cataluña, no es una competencia de la Generalitat.
Utilizar esta ley para hacer un referéndum independentista, vulnera el art. 122 del Estatut, que establece que las consultas deben realizarse sobre competencias de la Generalitat. Pero además esta ley pretende llamar consultas no referendarias, a lo que en realidad es un referéndum.
También resulta curioso que algunos digan que el derecho a decidir sirve para todo, pero sin embargo la propia ley prohíbe preguntar sobre impuestos o sobre recortes.
Nuestro NO a esta ley es en realidad un SI:
Si a la democracia, si al estado de derecho y si a la convivencia.
Si a Catalunya, si a España y si a Europa.
