Julio Roldán
Portaveu de Ciutadans a Esplugues de Llobregat
Entramos en las vacaciones más atípicas de los últimos tiempos. De nuevo España se sitúa tristemente a la cabeza de Europa en cuanto a rebrotes de la pandemia del COVID-19. Parece que no hemos aprendido nada en estos cuatro meses y con más de 40.000 personas fallecidas a causa del virus.
España tiene menos de la mitad de los rastreadores necesarios para controlar esta epidemia. Uno de los objetivos del Estado de Alarma, más allá de frenar el virus y el colapso de la UCI era ganar tiempo. Tiempo para comprar equipos, respiradores, pruebas, mascarillas, para reorganizar la industria y ser capaces de producir materiales nacionales, para reforzar las plantilla de sanitarios y profesionales de salud pública; que pudiera localizar cada contacto cercano de un caso, aislarlo, hacerle pruebas y frenar así la cadena de contagio.
Pues bien, en este tiempo no se han hecho los deberes. Cataluña tiene menos de un rastreador por cada 30.000 habitantes, cuando se recomienda uno cada 4.000 habitantes. Entre seis y siete veces menos de lo que se estima necesario.
Faltan medidas de prevención, test masivos, confinamientos selectivos, ambulancias de apoyo, rastreadores… FALTA GESTIÓN. Tanto presumir el Govern de lo bien que lo iban a hacer y en tan solo tres semanas han perdido el control de los contagios. Pero el sr. Torra nos sigue hablando de referéndums y ERC y su consellera de Salut están más preocupados de la visita del rey Felipe VI y de los borbones que de la salud de todas y todos los catalanes. Prioridades.
Otra preocupación se acrecienta especialmente en periodo vacacional. La ocupación ilegal sigue creciendo y España (un 58% en cinco años). Una de cada cuatro ocupaciones, se produce en Cataluña. Sirva de ejemplo de Pilar, enfermera de Vic a quien ocuparon su casa mientras trabajaba en Reus durante la pandemia. Por eso es tan importante que se apruebe la ley que Cs ha registrado:
-Desalojo exprés de los okupas
- protección de las familias
-Aumento de las penas
Ya está bien de proteger a los delincuentes y abandonar las familias. Urge aprobar esta ley y frenar esta lacar, que el gobierno tome nota y lo haba posible.